Caso Dreyfus
El más grande escándalo de la historia del país de Francia el
cual terminó en el año de 1906, fue el caso Dreyfus, en este los tribunales ordinarios
anularon el fallo que habían estipulado los militares, el cual contradecía lo
fijado por estos últimos. El veredicto final fue que Alfred Dreyfus era
inocente del delito de traición a su patria.
Todo
este proceso demoro 12 años y fue conocido como “Affaire Dreyfus” el cual inicio en 1894, en
este entonces una empleada en Paris de la embajada Alemana se encontró documentos
militares de Francia, esta funcionaria informo el hallazgo a sus superiores y
al realizar la investigación del caso, determinaron que había un espía, siendo
el principal sospechoso el capitán Dreyfus, el cual tenía raíces judías y de Alsacia.
Para la época el antisemitismo se había extendido por toda la región de
Francia. Además que la caligrafía de los documentos era muy parecida a la del
procesado.
Por
otro lado la prensa y el gobierno Francés reclamaban justicia, de tal modo que
el capitán Dreyfus fue expulsado del ejército en el consejo de guerra que le practicaron,
condenado a cadena perpetua y enviado a la isla del diablo en la región de
Guyana. Al pasar dos años cumpliendo su pena, llega un nuevo jefe del
departamento de inteligencia francés y descubre una evidencia que inculpa a
otro oficial el cual fue separado de su cargo, sin embargo este fue absuelto
por intereses corruptos.
Después
del juicio militar, aparece en la historia el novelista Emile Zola,
simpatizante de Dreyfus, escribe en uno de sus artículos una carta al
presidente de Francia informando todo lo falso en el caso Dreyfus, lo que trajo
como consecuencia que Zola fuera condenado por difamación y el destierro hacia Inglaterra.
Sin
embargo la verdad siempre sale a la luz, cuando uno de los primeros acusadores
de Dreyfus se suicida confesando que había falsificado varias pruebas.
Enseguida
el gobierno reabre el caso pero por alguna situación inesperada Dreyfus fue
hallado nuevamente culpable.
Sin
embargo fue indultado, pero ese lucho por siete años consecutivos su absolución
la cual fue dada por un tribunal civil.
El
caso provocó un cambio perdurable en Francia. El rechazo popular por la
persecución de Dreyftr desembocó en la separación de la Iglesia y el Estado en
1905 y facilitó el camino del gobierno a los partidos de izquierda franceses.
Alfredo Dreyfus fue un capitán de artillería, era
un militar íntegro, que honraba a su país sirviéndolo en el Ministerio de
Guerra.